IDD-Lat 2010

Venezuela

 
IDD-Lat 2010
Dim II
Dim III
Dim IV
Económica
Dim IV
Social
2,903
3,390
1,106
-0,499
 
  • Venezuela, que había venido presentando una mejora en el IDD-Lat desde el año 2007, quiebra esa tendencia y vuelve a caer este año (Ver Gráfico 3.86). No obstante presenta leves mejoras en las dimensiones II y III. La tendencia negativa responde a peores resultados en la Dimensión IV. Aún sigue estando entre los países con peor desempeño. Ocupa el 12º lugar de la tabla, ya que los peores resultados de otros países le permiten escalar dos lugares en el ranking regional.
 
  • En la Dimensión Respeto de los Derechos Políticos y las Libertades Civiles, el valor es levemente más alto que el del 2009 por el movimiento ascendente que tuvo el indicador de Género (Ver Gráfico 3.87). El resto de los indicadores se mantuvo estable, salvo que recibió una peor calificación en el Indice de Derechos Políticos. Sigue ocupando el último lugar del ranking.
En junio, partidos y líderes de oposición venezolanos presentaron una "mesa unitaria" que, dijeron, ofrecería una alternativa a las políticas impulsadas por el presidente Hugo Chávez. La mesa aspiraba a ser un mecanismo permanente, más allá de la coyuntura electoral. La plataforma reuniría a partidos, organizaciones no gubernamentales, representante del movimiento estudiantil y ciudadanos de a pie. Se trataba de una "instancia permanente de participación" que "no se agota en el tema electoral", pero que abordaría la posibilidad de presentar candidaturas únicas "en la circunstancia en que tengamos que discutirlo". El nacimiento de la nueva alianza opositora se anunció un día después de que Chávez destacaba que "casi la mitad" de los electores del país formaba parte del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), que él lideraba, con el millón de nuevos inscritos que -aseguró- pasaban a engrosar sus filas.
  • En la Dimensión III tiene el mismo comportamiento que la dimensión anterior (Ver Gráfico 3.88), porque mejora fuertemente el valor de Accountability, aunque empeora con parecida intensidad el indicador de Desestabilización. Debido a que el resto de los indicadores se mantuvo sin variaciones, apenas logró compensar las subas con las bajas.
Venezuela está en el 13º lugar de la tabla, ganando 4 lugares con respecto al 2009.
El año se inició con algunos sucesos políticos polémicos. Por un lado la Fiscalía de Venezuela solicitó el encarcelamiento preventivo del alcalde de Maracaibo y líder opositor, Manuel Rosales, a quien acusaba de enriquecimiento ilícito, sobre la base de un informe de 2007 de la Contraloría, según el cual el funcionario no pudo justificar ingresos que percibió cuando era gobernador de Zulia. El alcalde aseguró que lo que se estaba haciendo con él era "un linchamiento político". La medida se producía en momentos en que los líderes de esa provincia estaban enfrascados en un enfrentamiento con el presidente Chávez por el control de ciertos servicios que el gobierno central había decidido recuperar para la administración central. Estos incluían el puerto y el aeropuerto de Maracaibo, que la Asamblea Nacional había aprobado su devolución al gobierno nacional. Además se esperaba la pronta aprobación de una ley que crearía la figura de vicepresidentes para las regiones, designados directamente por el jefe del Estado.
En febrero de 2009 se realizó en Venezuela un nuevo Referéndum constitucional, llamado Referéndum Aprobatorio de la Enmienda Constitucional, para aprobar o rechazar la enmienda de los artículos 160, 162, 174, 192 y 230 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. La finalidad de la enmienda era la de permitir la postulación a cualquier cargo de elección popular de manera continua. Era el sexto referéndum convocado por Chávez desde 1999, y el cuarto relacionado con un tema constitucional. Los resultados oficiales entregaron la victoria a la opción favorable a la enmienda. La opción del "No" por su parte, obtuvo un 45,% de los votos. La votación contó con una abstención del 30%. El presidente Chávez, una vez anunciados los resultados, se dirigió al país y anunció que la siguiente etapa del "proceso revolucionario" sería de transición y se extendería del año 2009 al 2019. También anunció su precandidatura a las elecciones presidenciales para el periodo 2013-2019.
Entre enero y agosto de 2009 hubo casi el doble de manifestaciones que en todo 2008. Entre los asuntos que desencadenaron las protestas figuraron la nueva de ley de educación, mal recibida por los partidos de la oposición y el sector de la enseñanza privada, debido al descontento generado por la pérdida de determinados derechos laborales y servicios básicos.
A fines de agosto, la Asamblea Nacional de Venezuela aprobó no menos de cinco leyes en una maratónica sesión, en el marco de un "acelerón" al que instó el presidente Chávez, de forma que no queden "leyes anti revolucionarias" para finales de ese año. El Legislativo se había propuesto aprobar más de 50 leyes en ese período de sesiones, pero no llegó a la treintena. Algunas de ellas, sin embargo, desataron una intensa polémica, como la Ley de Procesos Electorales o la Ley de Educación. El Parlamento también le dio el visto bueno a la designación de un embajador venezolano para Perú. Caracas había roto relaciones con Lima ese año después de que Perú decidiera otorgarle asilo diplomático al líder opositor venezolano Manuel Rosales, al que Venezuela acusaba de corrupción. Con el nombramiento se abría el camino a una normalización de la situación.
  • El país no logra mejores resultados en la Subdimensión Capacidad para Generar Políticas que Aseguren Eficiencia Económica (Ver Gráfico 3.89), al obtener caídas en Libertad Económica, PIB per cápita e Inversión. Sólo mejoraron los indicadores de Endeudamiento y Brecha de Ingresos.
Pero pese a esas bajas continua ocupando el 2º lugar del ranking regional y se mantiene muy por encima del promedio regional.
A fines de noviembre el gobierno anunció la intervención de cuatro pequeños bancos por haber incumplido con regulaciones del ramo. Estas instituciones manejaban en conjunto menos del 6% de los depósitos y de los créditos otorgados por el sistema financiero venezolano. Los bancos seguirían operando con normalidad, pues se utilizó la modalidad de intervención a puertas abiertas. En lo que iba del año, el gobierno ya había intervenido el Stanford Bank, que luego fue vendido a otra institución financiera, y el estatal Banco Industrial de Venezuela. También había comprado el Banco de Venezuela, en manos del grupo español Santander, para convertirse en el principal actor del esquema financiero nacional.
El gobierno de Chávez también oficializó la toma de dos empresas cafetaleras, entre ellas una de las más importantes del país, Café Fama de América. Mediante un decreto, el gobierno declaró la "adquisición forzosa" de esa compañía, así como de Cafea C.A., una productora de café instantáneo. Se trataba de una de las ya existentes expropiaciones, que incluyeron rubros como arroz, papel, servicios petroleros, metalúrgicas y un hotel cinco estrellas, entre otros.
El presidente Chávez promulgó además una ley que permitía al Estado asumir el control de las empresas de servicios petroleros otorgadas a terceros y anunció la inmediata estatización de algunas de ellas. Con esto, el gobierno dio un paso más en la toma de control de empresas clave, en el marco del "plan socialista" del gobierno. La "Ley Orgánica que reserva al Estado Bienes y Servicios Conexos a las Actividades Primarias de Hidrocarburos", como se tituló, le otorgó al Estado -a través de la empresa Petróleos de Venezuela (PDVSA) o sus filiales- la posibilidad de asumir el manejo total o parcial de las compañías de inyección de agua, vapor o gas y las que trasladan trabajadores y prestan servicios.
A principios de año, el gobierno venezolano ajustó el presupuesto, incrementó el Impuesto al Valor Agregado y anunció políticas de austeridad, en respuesta al impacto de la baja en los precios del petróleo, que daba cuenta del 95% de todo lo que ingresa al país por concepto de exportaciones. Pero la recuperación del crudo permitió flexibilizar algunos de los controles -como la asignación de dólares a las empresas a cotización oficial para importar toda clase de productos- y mejorar las perspectivas de crecimiento, que el gobierno estimaba serían ligeramente superiores a cero para 2010.
Desde finales de 2009, Venezuela sufrió una profunda crisis energética que obligó al gobierno a aplicar el racionamiento eléctrico en todo el territorio venezolano, excepto en la capital, Caracas, donde se aplicó un programa de ahorro energético con penalizaciones. El detonante de esta crisis fue una profunda sequía ocasionada por el fenómeno climático de El Niño, que afectó a los embalses del sistema hidroeléctrico del país. Chávez también responsabilizó a la población por la disparidad entre la oferta y la demanda eléctrica, acusándolos de "derrochar" energía. Por su parte, la oposición venezolana responsabilizó al gobierno de Chávez por la crisis, acusándolo de no haber realizado las inversiones necesarias para seguir el ritmo de crecimiento de consumo eléctrico del país, así como de haber descuidado la infraestructura eléctrica. Chávez anunció que en el 2010 se instalarían plantas eléctricas con una capacidad de generación total de 6 GW, con lo que promete resolver definitivamente el problema del déficit eléctrico. El PIB per cápita se redujo un 4,5%, debido principalmente al impacto sobre la economía de la reducción del precio internacional del petróleo. El país continuó registrando la mayor tasa de inflación de América Latina en un contexto de déficit fiscal y de menor acceso a divisas a tasa de cambio oficial.
  • El Subíndice social presenta también un peor desempeño con respecto al año anterior (Ver Gráfico 390), debido a las malas puntuaciones obtenidas en Desempleo y Eficiencia Educativa. El resto de los indicadores tuvo un leve incremento. En el ranking social alcanza el 10º lugar, bajando un escalón con respecto al 2009, y sigue por debajo del promedio regional.
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